Hablamos mucho de que tenemos que estar más atentos, que estamos muy despistados. Nos enfadamos y explotamos, y eso se convierte en el rosario de la aurora. No paramos de darle vueltas a nuestra cabeza, de cosas que nos han pasado u otras que tenemos que hacer. ¿A quién no le gustaría mejorar en estos aspectos?¿Alguien nos ha enseñado a estar más atento a lo que ocurre en nosotros? Os presento la solución…